¿Estas realmente rodeado de idiotas?¿O puede ser que quizás el idiota eres tú?
Entender los comportamientos de personas con las que trabajas y no son como tú te ayudará a saber trabajar mejor con ellos y crear un mejor entorno de trabajo y un mejor equipo de producto
TL;DR
Durante un tiempo largo trabajé con un líder técnico que realmente creía que estaba rodeado de idiotas, y no se cortaba ni un pelo en decírselo a todo el mundo todo el rato.
Después de un tiempo entendí que no era que él estuviera rodeado de idiotas, sino que más bien él era muy inteligente y competente a nivel técnico y bastante incompetente a nivel de inteligencia emocional con sus compañeros.
El problema de esta actitud, es que si tratas a todo de idiotas, todo el mundo a tu alrededor se sentirá idiota.
En el libro “Rodeado de idiotas” el autor Thomas Erikson habla sobre cómo a veces clasificamos a las personas como “normales” (gente con la que nos podemos relacionar de forma muy sencilla) e “idiotas” (gente con la que no hay forma de conectar) de forma inconsciente y automática.
Este mismo autor luego nos explica cómo en realidad lo que hay de fondo de este tipo de clasificación es la realidad de que cada persona tiene un tipo de personalidad, y que tendemos a sentirnos a gusto con algunos tipos de personalidad a los que nos parecemos y chocamos con otros tipos de personalidad que son diferentes a nostros.
Los 4 tipos principales de personalidad sobre los que Thomas Erikson habla en el libro, que él asocia a colores, son los siguientes:
Comportamiento Rojo: Este tipo de personalidad es la que se ve en machos Alpha, en donde todo tiene que ser como ellos dicen.
Comportamiento Amarillo: Este tipo de personalidad es la sociable, en donde se quiere quedar bien con todo el mundo a cualquier precio.
Comportamiento Azul: Este tipo de personalidad es la de la persona analítica, que tiene muy en cuenta los datos analíticos y muy poco en cuenta las emociones de la gente.
Comportamiento Verde: Este tipo de personalidad es la del común de los mortales, que se adapta a las circunstancias y no les gusta el cambio.
Durante muchos años no entendía el comportamiento de algunos compañeros en el trabajo. Lo que hacían no tenía ningún tipo de sentido.
El libro “Rodeado de tontos” me ayudó mucho a entender a otras personas y sobre todo entender su forma de pensar y ver el mundo.
Además de esto, yo pude autoevaluar mi propia visión del mundo, y también aprender a adaptar mi comunicación a compañeros que operan y tienen una visión diferente del mundo y del trabajo.
Si no has oído hablar antes de esta segmentación de personalidades, y te tomas en serio los cambios de comunicación que te comparto, de verdad que vivirás un verdadero milagro en tu forma de trabajar y de relacionarte con otros perfiles profesionales.
¡Arrancamos!
La comunicación sólo ocurre en la persona que escucha
El punto más importante antes de empezar con el análisis de los diferentes perfiles de comportamiento y sus respectivos colores, hay que aclarar algo que es muy, muy importante.
Cuando comunicas, da un poco igual lo que digas, porque lo que realmente importa es lo que escucha la persona a la que comunicas. Y es que la persona a la que estás hablando tiene un filtro, y todo lo que digas estará filtrado por su realidad, y lo más duro de todo esto es que debido a esto empieza a importar poco lo que digas.
Quizás no te guste escuchar esto, y quizás incluso te deprima un poco pensar que, digas lo que digas, la persona que está oyendo en el otro lado lo tergiversará en base a su propio filtro de realidad.
Pues lo siento mucho, pero así es. Asúmelo.
La parte buena de que, si consigues descifrar la forma en la que la persona le gustaría que se comunicasen con ella, tienes un gran paso ganado, porque de esta forma podrás adaptar tu mensaje para que llegue a la persona con la que estás hablando.
¿Por qué esto es una buena noticia?
La buena noticia es que si consigues adaptar tu comunicación para que encaje en el modelo mental de la persona a la que hablas, esa persona tendrá más en cuenta lo que le estás diciendo (pasará su “filtro” de realidad) y podrás tener una conversación con esa persona.
La alternativa es que tus palabras hagan a esa persona reaccionar y de repente esa persona reaccione y lo único que esa persona tenga en la mente es la siguiente frase: “Este tipo es idiota”.
Por eso, hacer un esfuerzo por intuir la forma de comunicación de la persona que tienes delante y adaptar tu comunicación a esta personalidad puede darte muchas más oportunidades de poder llegar a esa persona.
Introducción al sistema DISA
El sistema de colores que presento está basado en un sistema llamado DISA, que sin las siglas que distinguir a persona Dominantes, Inspiradoras, eStables o Analíticas
Como vemos en el gráfico de abajo, diferentes perfiles ponen diferente foco diferentes objetivos.
Mientras que los perfiles rojos y azules están más orientados a ejecutar tareas y ver los problemas que impiden el progreso del trabajo, los perfiles más orientados al verde o amarillo están más orientados a las relaciones entre los miembros de un equipo.
Por otro lado, los perfiles rojo y amarillo suelen ser más extrovertidos y tienen a tomar acción, mientras que los perfiles azules y verdes suelen ser más reservados y esperan a que otros les digan lo que tienen que hacer.
Por bajar un poco más a tierra este tipo de perfiles, veamos algunas de las características que definen a estos perfiles
Un ejemplo extremo para entender los colores
Imagina que un día llegas a la oficina, y llega una persona de recursos humanos llega y dice que la empresa está en peligro y la única forma de salvarla es duplicar ingresos en los próximos 6 meses.
En esta situación pasaría lo siguiente:
Un perfil ROJO empezaría a dar órdenes a todo el mundo a los gritos y decir que son todos unos vagos y unos inútiles y por eso la empresa está en esta situación.
Un perfil AMARILLO estaría preocupado por todo el mundo y cómo se sienten e iría de un lado para otro intentando consolar y apoyar a todos sus compañeros.
Un perfil AZUL estaría haciendo excels con proyecciones y listas de acciones que todo el mundo, encerrado sólo en un cuarto para no tener distracciones
Un perfil VERDE no haría nada, y diría que él esta dispuesto a hacer lo que sea para que la empesa salga adelante y preguntaría en que puede ayudar
Si bien esto es una exageración, seguro que te viene gente a la cabeza con la que has trabajado o trabajas, y no te extrañaría ver este comportamiento si estas circunstancias se dieran en tu empresa.
Comportamiento Rojo
El caracter rojo es el arquetipo de jefe autoritario que piensa que todo el mundo es vago, idiota y no hace lo suficiente.
Empuja y empuja y lo más importante para este perfil es que se lleguen a los objetivos que él se ha planteado, en los tiempos que él se ha planteado, y de la forma en la que él percibe como correcto
Un comportamiento rojo está orientado a resultados, es extrovertido y no se muerde la lengua para decir a todo el mundo exactamente lo que piensan.
Es bastante normal que un CEO o presidente de una compañía sea rojo, ya que en él está el peso de conseguir los resultados de la compañía.
Se puede reconocer fácilmente a alguien con un comportamiento rojo porque suelen ser los que más alto hablan, los primeros en contestar a las preguntas y los primeros que dicen qué es lo que se tiene que hacer.
Un perfil rojo nunca está quieto, siempre está haciendo cosas y en acción para conseguir sus resultados. Para un Rojo todo es competición y el tiempo es dinero y no se puede desperdiciar.
Un Rojo te dirá cómo son las cosas, y jamás seguirá la corriente, porque eso es para perdedores.
Para un Rojo, un presupuesto conservador es un presupuesto de cobardes hecho por gente vaga a la que no le gusta trabajar.
El típico estereotipo de Rojo podría ser Donald Trump, que como no, suele llevar una corbata de color rojo alineada con su partido y su forma de ser
Ojo con las mujeres Rojas
Hay que tener cuidado con los estereotipos.
Si, también hay mujeres Rojas, y son igual de peligrosas que sus homólogos masculinos.
Si bien una mujer Roja no gritará y se enfrentará contigo cara a cara, ten por seguro que ella también tiene clarísimo lo que quiere y no parará bajo ninguna circunstancia hasta conseguir lo que ella piensa es el camino correcto a seguir.
Esta mujer Roja es la mujer que muestra un lado femenino, pero todo el mundo sabe que detrás de esa fachada hay cadáveres en el camino, que son las personas que no siguieron sus directrices.
Es curioso como este tipo de perfiles suele, de forma consciente o inconsciente, tomar orgullo de este color con el que se identifica.
Una mujer Roja de libro es sin duda Ana Patricia Botin. Quizás tenga la apariencia de que no es una mujer Roja, pero ya vemos el color del logo del banco que representa y el sector en el que se mueve.
No cabe duda de que si Ana Patricia Botin no fuese una mujer Roja no sería capaz de dirigir el Banco Santander en un sector tan duro y masculino como es el sector bancario.
Comportamiento Amarillo
Una persona amarilla brilla como el sol. Una personalidad amarilla atrae a todos, se lleva bien con todos, y nunca está en desacuerdo con nadie.
La persona amarilla tiene el estereotipo de vendedor, que todo el mundo se siente bien a su alrededor y de repente sin darte cuenta le compraste arena para no sabes bien que cosa estando en medio del desierto
Las fiestas en la casa de un amarillo son geniales. Todo está perfecto y la gente se siente tan a gusto y tan bien y el ambiente es relajado. Ten por seguro que un amarillo nunca se olvidará de tu cumpleaños y siempre estará ahí para ayudarte en lo que necesites.
Las personas amarillas son las que más amigos tienen. También son los que más contactos tienen en su teléfono, los que mejor se lleva con todo el mundo, los que más tarjetas de cumpleaños y navidad recibe.
Creo que pillas el punto.
Los amarillos también suelen tomar decisiones de forma impulsiva, y en la mayoría de las veces están basadas en sus emociones o haciendo lo posible para que todo el mundo se sienta bien.
Y por cerrar este capítulo tan amarillo, decir que los amarillos son las personas más alegres y optimistas que hay en el mundo. Nunca hay un problema y siempre todo saldrá bien
Un perfil muy amarillo podríamos decir que sería el actor Robin Williams, y uno de sus papeles más amarillos podría ser “Patch Adams” en donde hace de doctor para niños con cancer. Nada puede ser más duro y triste que un niño enfermo, pero Patch Adams va a atenderlos siempre optimista y con una sonrisa.
Comportamiento Verde
El comportamiento verde es el más común de todos. Es el que pregunta algo así como ¿cómo vamos con esto? O ¿Esto no es tan urgente, verdad?
El verde le va muy bien a este tipo de personalidad porque es el color de un camaleón. Pasa desapercibido, se adapta a lo que haya y nunca intenta destacar.
Tu amigo verde no se olvida de tus cumpleaños y suelen ser bastante amables, aunque no tanto como los amarillos.
Muchos verdes trabajan en el sector público, en donde se les suele decir que tienen que hacer, tampoco es que se vayan a volver millonarios, pero tampoco tienen que poner 12 horas de trabajo al día para que las cosas salgan adelante.
Se llevan bien con la gente, hacen lo que tienen que hacer, y se van a casa cuando toca. Son agradables y da gusto tomarse un café con ellos porque siempre hay algo interesante y superficial sobre lo que hablar.
Suelen anteponerse al grupo en bastantes ocasiones, y siempre están dispuestos a echar una mano si se lo piden.
Uno de los puntos débiles de las personas verdes es que no les gusta NADA el cambio, y harán todo lo que sea posible para evitarlo. Y es que no les gusta NADA las sorpresas, y siempre les gusta que todo esté en orden para tenerlo todo bajo control.
A los verdes tampoco les gusta liderar. ¿Quien yo? No, no, pero si yo no valgo ni estoy preparado para esto.
Un verde no levantará la mano para pedir más responsabilidad ni tampoco pedirá un aumento de sueldo. Lo importante es hacer bien mi trabajo, y quizás alguien se da cuenta.
En este caso no pondré ninguna foto de un verde, porque seguramente tengas a más de uno o dos verdes en tu vida.
Comportamiento Azul
Solemos pensar en los azules como si no tuvieran sangre o corazón, o más bien como si fueran una persona biónica.
En general los azules están muy preocupados por la precisión de las cosas y quieren entender cómo funciona todo.
Un azul es la persona que entiende perfectamente cómo funciona el código de un programa y si no lo entiende puede estar horas revisando el código hasta que esté todo 100% claro en su cabeza.
En general un azul suele decir las evidencias tal y como él las ve de forma racional y objetiva. Si hay inflación y el coste de vida está subiendo y esto está afectando a la economía y piensa, basado en sus cálculos, que todo irá a peor, lo dirá.
Y le dará igual si la persona que está al lado suyo está en el paro y tiene una situación delicada financieramente hablando. Un azul necesita describir la realidad de forma objetiva y tiene poco o nada de cuidado con las emociones de la gente.
Un azul es muy metódico y siempre tiene claro cuáles son sus fuentes y cómo llegó a las conclusiones a las que llegó. Y si alguien le cuestiona, en general no se enfada e intenta rebatir. Lo más normal es que un azul desconecte y piense para sus adentros “no me importa, y tu eres idiota”.
Un azul puede saber la respuesta, pero no la dirá a menos que se la preguntes de forma directa.
A un azul no le interesa que le digan lo bien o mal que hace las cosas. Lo que le importa es resolver problemas y estimular su necesidad de entender la realidad de forma objetiva y tener toda la información posible para resolver ese enigma que tienen delante suyo.
A un azul no le cuesta tomar decisiones, pero siempre querrá tener toda la información posible para no equivocarse al tomar una decisión concreta. Por eso, si pueden obtener más datos, esperarán para poder tomar una mejor decisión.
A los azules les cuesta mucho expresar emociones o mostrar sentimientos.
Si tuviéramos que poner cara a un Azul, el mejor personaje que lo representaría sería Spock, el famoso cyborg de la serie Star Trek
¿Y tú, qué color eres?
Una de las mayores revelaciones que tuve con este modelo de clasificación de personas no fue entender mejor a los demás, sino que fue un auto análisis de cómo era yo y porqué en diferentes momentos de mi carrera profesional chocaba con otros perfiles.
Y la respuesta me dió como una pedrada en la cabeza. Yo, con mi background en ingeniería, siempre he sido un azul de libro.
De pequeño me gustaba desmontar y volver a montar cosas, y me fascinaban y me siguen fascinando los ordenadores.
Personalmente me considero una persona objetiva que le gusta entender la realidad tal y como es, y poder basar mis decisiones en datos reales y no ficción u opiniones.
También durante mucho tiempo he de confesar que no le he prestado demasiada atención a las relaciones personales en mis diferentes trabajos.
Teniendo esta visión de mí mismo, no me extraña que muchos de mis amigos sean ingenieros, y que suela trabajar muy bien con este tipo de perfil y que durante mucho tiempo haya chocado con perfiles más amarillos o verdes, a los que consideraba subjetivos y poco racionales.
Cuento esto porque es muy importante saber “de qué pie cojeas” para poder adaptar tu comunicación y comportamientos a otros perfiles.
Esto no quiere decir que seas falso o poco genuino. Lo que quiere decir es lo que expliqué al principio de este post.
Esto es, que vale la pena adaptar tu comunicación para que llegue al receptor, porque esta es la parte más importante de tu mensaje: Que la persona a la que va dirigido entienda lo que le estás comunicando.
Estrategias de comunicación con otros colores
Una advertencia antes de empezar esta sección.
Cuando leas la comunicación propuesta para un color concreto y te resuene este tipo de comunicación, esto te dará una pista muy grande sobre tu tendencia de color.
Por cierto, así como se dice que todo no es “blanco y negro”, en este caso nadie es “rojo, amarillo, verde o azul”. Todos tenemos diferentes colores asociados a nuestra personalidad, pero siempre hay una tendencia a uno de los 4 colores sea el dominante.
Cómo tratar con una persona roja
Empecemos por entender qué es lo que realmente espera un rojo de nosotros y en base a eso cómo deberíamos comportarnos
Con esto en mente, veamos cómo podríamos trabajar mejor con una persona roja.
Haz lo que te pido y hazlo YA: Un rojo quiere que las cosas se hagan con él quiere y no quiere que le des vueltas, así que lo mejor que puedes hacer es hacer lo que te pide.
¿Quieres algo? ¡¡HABLA!!: Los rojos son muy directos, así que esperarán que les digas las cosas y vayamos al grano. A veces otros perfiles quieren dar contexto porque es importante, pero intenta limitarlo a lo estrictamente necesario y luego se claro con lo que necesitas de un rojo
Habla del tema que tengas que hablar, no des vueltas: A los rojos les importan tres pepinos tus vacaciones o tu familia. Ellos van al trabajo a trabajar y hacer que las cosas pasen. Quizás algún día le cuentes temas personales, pero si ves que se distrae o no le importa, no lo intentes de nuevo en el futuro
Toma una decisión, no vaciles y no vayas a los detalles: Haz los deberes antes de ir a ver un rojo, y no le cuentes los detalles. Si entras en una reunión con un rojo y no tienes clara la decisión o acciones a tomar, no tengas la reunión. El rojo se pondrá nervioso porque estarás haciéndole perder el tiempo. Por eso es importante que tengas todo destilado y con las acciones claras antes de ver a un rojo.
Prepárate para la guerra si le llevas la contraria: A los rojos no les gusta que les lleven la contraria, y están preparados para ir a la guerra y ganarla. Si vas a llevar la contraria a un rojo, prepárate para la guerra y analiza si tienes posibilidades verdaderas de ganar. Y si no ves con claridad que tu saldrás victorioso de esta guerra, mejor evítalo, porque seguro perderás.
Tolerancia cero al bullying: Algunos rojos pierden los papeles y se ponen a gritar o faltan al respeto a los compañeros. Si esto te pasa con un rojo, no pierdas el tiempo intentando explicar que eso está mal, no te escuchará. En este tipo de situaciones necesitarás apagar el fuego con fuego. Esto quiere decir que tienes que decir que no comportan este tipo de comportamiento nunca jamás y que si se vuelve a repetir irás a recursos humanos. Y si no paras este comportamiento, prepárate para el infierno, porque una persona roja no parará por sí mismo.
Cómo tratar con una persona amarilla
A los amarillos les encanta trabajar en un ambiente agradable y tranquilo. Les encanta que el sol brille y todo esté en paz y armonía.
Con esto en mente, veamos cómo podríamos trabajar mejor con una persona amarilla.
Haz que se sienta cuidado y respaldado: Si un amarillo se siente bien, trabajará con alegría y traerá armonía a un equipo. Creará armonía y buen rollo y será muy agradable trabajar a su lado. Por eso haz lo posible para que un amarillo se sienta cuidado y protegido y que sienta que él importa
No le aburras con los detalles, se práctico: Un amarillo le gusta hacer las cosas a alto nivel y no meterse en los detalles del “porqué”. Dile lo que tiene que hacer y sé claro y él estará encantado de hacerlo. Y si es en grupo y colaborando con otros, mejor que mejor.
Muestra tus sentimientos y di que sigues tus instintos: Si quieres conectar con un amarillo, comparte más de ti y quien eres y temas tuyos personales. Y también diles que te guías por tu intuición, aunque antes hayas hecho todos los análisis objetivos para tomar una decisión. Lo importante es la conexión emocional para poder trabajar bien con un amarillo.
Los amarillos no te escuchan: Los amarillos suelen estar en sus pensamientos, y viendo como hacer para caerle bien a todo el mundo, por lo que no suelen ser gente que preste mucha atención al presente. El punto importante aquí es que tengas claro esto, y hagas preguntas para confirmar que un amarillo realmente entendió lo que le dijiste y qué tiene que hacer
Haz seguimiento continuo de un amarillo, y siempre con cariño: Enfadarte o amenazar a un amarillo no funciona. Acepta que quizás se distrae y pierde el foco, y que tienes que, con amor, volver a guiarle en el camino para que las cosas se lleven a cabo.
Dales estructuras sobre las que trabajar: En general las personas amarillas son muy desordenadas. Suelen ser los artistas preocupados por la belleza de la fotografía que no se dan cuenta que tienen el coche que parece un estercolero. Lo mejor que puedes hacer para ayudar a un amarillo es darles estructuras y tareas claras sobre las que tienen que trabajar.
Cómo tratar con una persona verde
Los verdes les gusta la certidumbre y que las cosas sigan como están. No les gusta los cambios y tienen miedo a que haya momentos de incertidumbre e inseguridad.
Con esto en mente, veamos cómo podríamos trabajar mejor con una persona verde.
Haz lo posible por dar seguridad a un verde: Un verde tiene miedo del cambio y de los desafíos, y es por eso que hay que explicar y animarle a que no tenga miedo y se tire a la piscina. Intenta decirle que el césped estará más verde en el otro lado del patio, y que no puede superar su miedo al cambio, y acompáñalo cuando acepte afrontar sus miedos.
Planea y define el trabajo de un verde: Si a un verde le dices que haga algo, lo hará. Quédate tranquilo porque es una persona de fiar. Lo que no hará es definir su propio trabajo, por lo que ahí habrá que ayudar a un verde a que tenga claro lo que tiene que hacer, porque él no tendrá la iniciativa de hacerlo.
Tiempos de descanso y relax: Un verde suele ser una persona pasiva, por lo que hay que estar empujando todo el rato para que las cosas pasen. Esto no es malo de por si, pero también es importante no pasarse de empuje, porque los verdes también necesitan un tiempo de relax y de poder parar a descansar. Ten empatía y date cuenta que un verde no está en su hábitat natural haciendo todo lo que le pides.
Si criticas a un verde, hazlo en privado y con cuidado: A un verde le suele ser aceptado por los demás y sentir que encaja. Lo peor que puedes hacer con un verde es criticarlo delante de otros, ya que se sentirá atacado. Y a los verdes no les gusta nada el conflicto. Es por eso que necesitas dar tu feedback en privado y siempre con foco en que esta persona pueda usarlo para crecer y mejorar personal y profesionalmente.
Explica los procesos de cambio en detalle: Si va a haber un cambio organizacional, o una nueva forma de trabajar, explícalo en detalle y lleva de la mano a los verdes, ya que ellos necesitan sensación de seguridad y que todo seguirá igual, aunque esté cambiando.
Cómo tratar con una persona azul
Quería decir que no es que los azules no tienen emociones. Las tienen, lo único que no suelen expresarlas de forma tan abierta como otros colores, y suelen poner foco en la tarea que tienen que realizar.
Con esto en mente, veamos cómo podríamos trabajar mejor con una persona azul.
Todo tiene que estar analizado y planeado: No intentes empezar un proyecto sin haber hecho los deberes antes, pero también ayuda a una person azul a aceptar la incertidumbre y que se puede empezar un proyecto sin tener todas las respuestas
No hemos venido aquí a hacer amigos: Si bien es verdad que el trabajo es el trabajo, no está de más recordarle a un azul que las relaciones personales importan. Con detalle, y sobre todo con hechos factibles, explica a un azul cuando no tuvo cuidado con los sentimientos de los compañeros, y ayuda a definir acciones concretas para que un azul pueda mejorar su empatía con los compañeros.
No le hables de visión y misión. Presenta tareas y proyectos concretos: Si le hablas a un azul sobre tu visión de cambiar el mundo, su cerebro se derretirá. Es por eso que bajes mucho a tierra y hables de tareas claras y definidas y planes de proyecto que estén bien pensados y que se puedan ejecutar en tiempos realistas. Si tienes datos financieros, mejor. No hay cosa que más le guste a un azul que los datos objetivos
No me cuentes tu vida, preséntame los datos: Prepárate bien las reuniones con una persona azul, y sobre todo prepara bien los datos. Si puedes, busca a otra persona azul que pueda revisar con ojo crítico y analítico los datos que presentas, para que no haya fisuras en tu argumentación, y si las hay, arréglalo antes de presentársela al azul al que necesitas convencer con tus argumentos.
La calidad y los detalles importan: A un azul le importa ver que hay calidad y que has puesto el trabajo necesario a todos los niveles, y que todo está bien definido y con detalle. Si quieres impresionar y conseguir el respecto de un azul, vas a tener que trabajar más y poner mucho cuidado con los detalles.
Pon timelines claros y comunícanos: Para un azul lo más importante es que todo esté perfecto y no se quede un cabo suelto. Si la gente tiene que esperar, que espere, pero ese bug que podría pasar un 0,001% no puede salir a producción porque todo podría volar por los aires. Por eso, da contexto de las expectativas en donde tienen que salir las cosas, y ayuda a un azul a ver que se puede salir con un producto imperfecto siempre que más adelante se arregle
Ayúdale a tomar decisiones sin toda la información: Ayudar a un azul a conectar con su intuición es una tarea harto difícil, por no decir imposible. Y sin embargo es importante ayudar a los azules a tomar decisiones y tomar riesgos a pesar de que no tengan toda la información a su disposición, porque sino puede que todo se empiece a bloquear.
Conclusión
¡Si has leído hasta aquí, enhorabuena!
Este post es medio largo, pero el mensaje se puede resumir de forma muy corta.
El secreto es poder entender qué tipo de personalidad tiene la persona que tienes delante, y ajustar tu frecuencia y forma de hablar al color de la otra persona.
Esto quiere decir que si la persona es roja, tienes que comportarte como un rojo. Si la persona es amarilla, tienes que comportarte como un amarillo. Si la persona es verde, tienes que comportarte como un verde, y como ya podrás intuir a estas alturas, si la persona es azul, tendrás que cambiar tu frecuencia y forma de comunicación a la de una persona azul.
¿Pero no es esto manipulativo?
No bajo mi punto de vista. Yo soy bastante azul, ya pude ver esto hace tiempo. Si me presentan datos y me hablan de puntos objetivos, me pongo más feliz que una lombriz.
Con esto quiero decir que a todos nos gusta que nos hablen en nuestro idioma, y nosotros también podemos y debemos hacer el esfuerzo de adaptarse a la forma de comunicar que mejor se adapta a la personalidad de cada uno.
Y es que la misión aquí es la que comentamos al principio. Necesitamos que el mensaje llegue para poder trabajar en equipo de una forma más efectiva, y ayuda mucho para conseguir este objetivo que las personas se tienen que sentir escuchadas y aceptadas con sus características particulares.
Esto que parece fácil te digo que no lo es, porque la cabra tira al monte, y hay que hacer un ejercicio fuerte de auto-conocimiento combinado con un ejercicio de empatía y observación fuerte, y luego acompañarlo con una comunicación que seguramente no nos salga de forma natural.
Pero te aseguro que los resultados son espectaculares, y el cambio en la productividad de tu equipo te resultará cuasi mágica.
Por último, pedirte que si te gustó este artículo por favor le des al corazoncito, y si crees que este artículo le puede resultar útil a alguien te pido que por favor se lo reenvíes.
Desconocía todo esto y me ha volado la cabeza. Tengo que estudiarlo detenidamente.
No sé si saldrá de aquí la expresión „para gustos los colores „
De todas formas, a un compañero de trabajo que putea a los demás yo le llamaría simplemente gilipollas.
Hola Rafael y perdón que no te conteste a este mensaje!!
Bueno, gilipollas no, en este caso sería “rojo” 🤣🤣🤣🤣
De verdad que esto es magia y ayuda a trabajar mejor con cualquier perfil y chocar menos, y si hay que chocar saber “cómo chocar” se la mejor forma.
A mi me ha cambiado la vida y me ha ayudado a ser más feliz en el trabajo y espero que también esté consiguiendo hacer a la gente que trabaja conmigo más feliz porque se siente entendida.
Y lo único que hay que hacer es ponerle colores a la gente!
Gracias por tu comentario y ya me contarás que colores hay en tu vida personal y profesional 😉